Canción
No lo calles, no lo omitas,
No lo calles, no lo omitas,
en repetirme un te
quiero
pues es agua de un
venero
del que bebo en Piedra
Escrita.
Y cerca, en el Tabalón,
cuando el almendro
está en flor
tu declaración de amor
bálsamo es del
corazón.
Y siguiendo por el llano
cuando mi mano
aprisionas
con las hojas me
coronas
del amor del avellano.
Y las zarzas y los cardos
en rosas se han
convertido
y un rosal ha
florecido
entre espliegos y
entre nardos.
Y nos contemplan las Peñas
y saben que nos amamos,
y el amor que atesoramos
al besarme les
enseñas.