miércoles, 19 de junio de 2013

UNA FLAMÍGERA ESPADA

                                              A la Virgen del Roble

Una flamígera espada
te traspasó el corazón:
Gabriel de la Anunciación
te la ensartó nacarada.
La imperativa llamada
de al Mesías dar a luz,
te vistió el blanco capuz
de ver su padecimiento,
su agonía y su tormento,
afrentosa en una cruz.