La corrida de seis toros
y en el cartel tres toreros;
aforo de los aforos,
no se dan ya, olés sonoros
frustración sí y desesperos.
Si la corrida fue mala
peores fueron los diestros;
peñas, alguna bengala,
que por el cielo hace escala
por no ver tales maestros.
Tedio, mímica y bostezos
por las Peñas barloventos,
por la mañana hubo rezos
en procesión sin tropiezos
con Virgen de Cenicientos.
¿Por qué de esta obstinación
de diestros de alternativa?
Sin base y continuación,
sin arte y en conclusión,
toreros a la deriva.
Lo nuestro son novilleros
cabeza de escalafón,
los mejores, los punteros,
con maneras de toreros
que no tienen parangón.
Mientras así no se vea
no habrá comentario alguno
de la afición que no sea
que son toros de una aldea
que nos salen de uno en uno.