Solicitamos de nuestros vecinos
llevados de la mejor
voluntad,
como muestra de buena
vecindad
reemprender
ancestrales caminos.
En la agricultura
aunar los destinos
de gentes ricas en
diversidad,
sin entrar en su credo
ni su edad
o si antes cometieron
desatinos.
En la tierra yerma de
la piscina
del exterior que hallándose
extramuros,
pedimos cultivar en
ella un huerto.
Nexo de unión entre
gente vecina
que comparta aficiones
tras sus muros
y en amistad su fruto
será cierto.
“ Por mi mano plantado tengo un huerto”
(Fray Luis de León)