El despertar de la
aurora
me vio velando tu sueño
me vio velando tu sueño
y me sumí en un
ensueño
por tu visión
cegadora.
De luz del sol
portadora
profundamente dormida,
profundamente dormida,
con tu belleza sumida
en la tibieza del
lecho,
te estreché contra mi
pecho
y despertaste a la
vida.